Estamos seguros de que en alguna ocasión, ya sea en un restaurante, fiesta o con amigos has probado la crema de orujo, pero ¿sabes cual es realmente su origen?.
En Blas Bermejo, nos encanta que estéis informados de todo, por eso en este artículo te contamos el origen de la crema de orujo. ¿Comenzamos?.
El orujo es una bebida espirituosa, la cual se obtiene a partir de orujos de uva fermentados y destilados, donde su color marrón claro viene por la implementación del caramelo. Normalmente estas bebidas suelen tener un grado de alcohol del 37.5%.
La producción del orujo se encuentra muy ligada a la producción que ha tenido tanto la viña como la uva y sus variedades, ya que una vez que se ha conseguido la producción de vino deseado, los restos, también conocido como “bagazo” son los que se utilizan para obtener un orujo de calidad, por lo que deben estar fermentados.
La comunidad autónoma de Galicia, situada en el norte de España, guarda una tradición en relación a la producción del aguardiente de orujo. Los gallegos comenzaron a utilizar los hollejos, las semillas y los tallos, procedentes de los restos de las uvas utilizadas en la producción de vino para crear el orujo.
Aunque, tras varios años de experimentación, consiguieron crear la actual bebida “crema de orujo» mezclando el espirituoso de antaño con ingredientes más dulces como son la leche, el azúcar y otros aromas naturales.
Esta producción ha seguido una tradición artesanal propia de la región y por ello hoy en día, la tradición gallega es considerada como la cuna de la crema de orujo.
Actualmente, no existe ningún inventor de la crema de orujo, pero sí existen varias leyendas y anécdotas en relación a su creación. A continuación, vamos a contar la más relevantes:
Antiguamente, los monjes en Galicia utilizaban el orujo destilado para remedios medicinales, pero al realizar unos experimentos mezclaron el orujo con miel y otros ingredientes, creando por accidente la actual crema de orujo.
Para sobrellevar las duras jornadas de trabajo y para mantener el calor en las noches de invierno. Los pastores gallegos mezclaron el aguardiente con leche y miel, creando una espirituoso dulce, el cual se ha ido refinando hasta llegar a la crema de orujo que hoy en día conocemos.
La anécdota más común hace referencia a una familia de Galicia desconocida, la cual, desarrolló y refinó la receta de la crema de orujo generación tras generación, transmitiendola únicamente a los familiares más cercanos, por ello su origen tiene un carácter oculto y misterioso.
Para producir una crema de orujo de alta calidad, hace falta una base de leche y nata procedente de las vacas gallegas y bastante estable, ya que después se va a proceder a mezclarse con azúcar y el orujo que tenemos previamente almacerado.
Una vez que se ha llevado a cabo esta combinación de ingredientes dejamos reposar durante varias horas y la conservamos en un lugar fresco.
Algunos de los ingredientes naturales y poco conocidos de este licor son: el café molido, la esencia de vainilla o la leche condensada. Estos le aportan un sabor y textura únicos a este espirituoso tan característico.
Es importante resaltar, que tenemos que tener un especial control de calidad con cada uno de los ingredientes que se van a utilizar en la producción de este licor, ya que una mínima inestabilidad en sus estándares de calidad, podría perjudicar gravemente al consumidor a la hora de tomar este espirituoso en mal estado.
A continuación, vamos a comentar el papel que tiene la crema de orujo en la cultura y festividades de galicia:
La crema de orujo se encuentra muy presente en las festividades locales y regionales de la comunidad autónoma de Galicia. por ejemplo, en sus fiestas patronales de Santa María de la Asunción, cuya celebración es el 7 de septiembre de cada año. También tiene un papel importante en ferias o eventos tradicionales donde puedes encontrar degustaciones de este licor en algunos puestos comerciales.
Por otro lado la crema de orujo se ha convertido en un obsequio muy popular tanto en celebraciones íntimas, como reuniones familiares o eventos como bautizos comuniones o bodas.
En cuanto a la gastronomía, la crema de orujo es un producto muy versátil para introducirlo en la repostería o bien, para maridarlo con diversos postres como pueden ser las frutas dulces, pasteles, chocolates y similares. Incluso, como acompañamiento de algunos quesos. Este aspecto culinario es muy característico de la gastronomía gallega.
Cabe destacar que su mayor uso se encuentra en los cafés, como es el caso del “café irlandés” o para consumirlo en cócteles dulces.
A continuación, vamos a comentar las tendencias actuales más destacadas en el consumo de crema de orujo.
Hoy en día, las tendencias del consumo respecto a la crema de orujo han cambiado notablemente a cómo se consumía en sus inicios, ya que los consumidores actuales les encanta buscar nuevas experiencias gastronómicas y demandan nuevos sabores de la crema de orujo como puede ser: el sabor a café, chocolate, avellana o menta entre otros.
Aunque, al mismo tiempo, los clientes tienen pasión por degustar el sabor artesanal y más natural de los ingredientes que componen sus productos más queridos, en este caso, la crema de orujo Por lo que el producto que contenga un origen auténtico, artesanal y de alta calidad goza de muy buena reputación en el mercado.
En conclusión, la crema de orujo tiene un origen bastante peculiar a la vez que interesante. Cabe destacar su versatilidad en la gastronomía y su enriquecedora cultura, sobre todo en la comunidad de Galicia.
En Blas Bermejo no queremos que te pierdas el sabor único de este espirituoso, por eso puedes encontrar la auténtica crema de orujo en nuestra sección de Digestivos y Cremas ¿Qué esperas para probarla?
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